Se dice cuando alguien anda atarantado, confundido o medio ido, como si trajera un golpecito en la cabeza o no hubiera dormido nada. No siempre es literal, muchas veces es puro cotorreo para decir que la persona no está pensando claro y anda tomando decisiones bien raras. Suena muy del norte y pega sabroso.
"No le hagas caso al Pepe, anda bien chocado, primero se puso la playera al revés y luego quiso pagar los tacos con la tarjeta del camión."