Se dice cuando alguien está especialmente atractivo o resultón, de esos que los ves y te entra el antojo. Vamos, que está para comérselo con los ojos y levanta suspiros a su paso. Puede ser por ir bien arreglado, por el rollo que lleva o porque hoy le ha tocado el día de brillar. Y sí, tiene su puntito cursi.
"Mira al Juanito con el traje nuevo, niño. Hoy está como un caramelo, se ha echao colonia y ya va por la calle creyéndose el rey de la feria."