Se dice cuando sales a la calle bien fodongo, sin arreglarte ni tantito, como que te valió la facha. Puede ser por flojera, por andar con prisa o porque nomás ibas a hacer un mandado rápido y no te ibas a producir. Muy de andar en modo “me da igual”, y sí, se nota.
"Hoy me fui de cuachalotes al tianguis, en chanclas y con el pelo parado, porque preferí dormir otro ratito que ponerme a arreglarme."