Se dice cuando alguien llega montado en su moto o en la bici, bien campante, como presumiendo el estilo y la entrada. La chula es la nave, y el que viene sobre ella se siente galán, aunque traiga la Italika tosiendo o la bici sin frenos. Va con tonito de carrilla, pero con cariño.
"Mira nomás, ya llegó Pedro sobre la chula, con la gorrita pa' atrás y haciendo ruido con la moto como si fuera desfile."