Expresión local para decir que alguien anda bien agüitado, bajoneado o medio tristón, como si se le hubieran borrado los colores del parchís de tanta mala vibra. Se usa cuando la banda trae la mirada caída y el ánimo por los suelos. Y la neta suena tan tierna que hasta dan ganas de invitarle una chela.
"Desde que lo bateó la Lupita, el Rodrigo anda de parchís, ni las chelas, ni la cumbia, ni los tacos al pastor lo levantan."