Expresión colimense para hablar de echarse una siesta sabrosa e inesperada después de comer, cuando el calor pega duro y la panza llena te empieza a pedir cama o sillón. Es como rendirse tantito al sueño y dejar que el cuerpo se apague un rato. Y la neta, con el bochorno de Colima, hasta se antoja diario.
"Con este calorón y la panza llena de pozole, mejor me voy a dar el tumbón un rato con el ventilador a todo lo que da antes de irme al malecón con la banda"