Se dice cuando alguien sale disparado, se va corriendo a toda mecha para evitar un lío, una vergüenza o una situación incómoda. Es como hacer la retirada táctica, pero en modo Caribe y sin mirar atrás. Muy de cuando te pillan mal parado y tu cuerpo decide por ti: pies pa’ qué los quiero.
"Apenas escuchó que venía el cobradiario por la esquina, el man se dio la voladora, brincó el andén y se perdió pa’ la playa como si lo persiguiera el diablo."