Dicho oaxaqueño para decir que te vas a echar una siestita, normalmente después de comer bien y con el calor pegando duro. Es el plan clásico de sobremesa: panza llena, hamaca o cama y a desaparecer un rato. Suena inocente, pero en Oaxaca lo entienden al vuelo. Bendita costumbre, la neta.
"Ya me eché dos tlayudas y un agua de horchata, ahorita no cuenten conmigo: me voy a echar la fruta en la hamaca, que el calor está criminal."