Se usa para decir que alguien está dolido, ardido o medio resentido porque no consiguió algo que quería, ya sea una jeva, un favor o hasta ganar un juego de dominó. Es como estar picado por dentro, haciendo berrinche silencioso. Es muy de panas que no aceptan perder y se quedan con la espinita clavada, aunque finjan que todo bien.

"Chamo, deja la lloradera, estás todo picao porque perdiste en la caimanera y hasta tu mamá te vaciló en la tribuna."

Se usa cuando alguien se queda resentido, dolido o con la espinita clavada porque le ganaste, lo dejaste en ridículo o no le salió algo como quería. No es solo estar enojado, es ese pique orgulloso que dura rato y que a veces da hasta risa verlo. Eso sí, mejor no seguirle pinchando o explota.

"Desde que le metí tres goles en la potra del barrio, el maje anda todo picao, ni se aparece a la mejenga y dice que está ocupado estudiando, ajá sí, pobrecito su orgullo."

¿Te gusta nuestro diccionario?

Además de rebuscar expresiones cañoneras, también contamos chistesitos.

Échale un ojo, si no te ríes en 10 segundos, te hacemos un descuento.

Tu cesta: 0,00 € (0 productos)
Imagen del producto

Tu Carrito de Magia

Tu carrito está vacío. ¡Adopta un Magikito!