Se le suelta a alguien que anda en modo flojera extrema, tan inútil ese día que ni para espantar una abeja se mueve. Vamos, que no hace nada de nada y encima con una pachorra que desespera. Es regaño con humor campechano, de esos que pican pero dan risa si te cae bien quien te lo dice.
"Juanito, ya deja el celular y échame la mano con los trastes, porque hoy estás que no friegas una abeja y la casa parece tianguis."