En Córdoba se usa para hablar de alguien que se relaja tanto que parece que no hace nada, como si flotara pancho en el río sin preocuparse por el mundo. Es esa actitud de vago zen que mira el techo mientras los demás laburan. Y hay que admitir que, bien hecha, esa rama tienta bastante.
"Che, ¿y el Fede? Tenía que venir a ayudar con el asado y el loco está allá en la reposera haciendo la rama, ni se digna a arrimar un tronco."