Expresión muy nariñense de sorpresa o disgusto, como cuando algo te sale al revés o te agarra fuera de base. Es parecida a decir carajo o miércoles, pero más suave y hasta un poco chistosa. Sirve tanto cuando algo se daña, cuando te asustan o cuando ves una metida de pata monumental. Y hay que admitir que suena bien sabroso.

"Parce, vi el recibo de la luz y casi me desmayo, ¡las hijas!, con esa plata me iba de paseo a Pasto todo el fincho."

¿Te gusta nuestro diccionario?

Además de rebuscar expresiones cañoneras, también contamos chistesitos.

Échale un ojo, si no te ríes en 10 segundos, te hacemos un descuento.

Tu cesta: 0,00 € (0 productos)
Imagen del producto

Tu Carrito de Magia

Tu carrito está vacío. ¡Adopta un Magikito!