Se usa cuando algo te tumba el ánimo de una, tipo decepción, fastidio o tristeza repentina porque la vaina salió mal. Es ese momento en que todo pintaba bien y de repente se va al piso. Muy de Aragua y de Venezuela en general, y hay que admitir que suena sabroso para quejarse sin hacer tanto drama.

"Tenía todo listo para ir a la playa y justo empezó a diluviar, se fue la luz y hasta se dañó la nevera... qué bajón, chamo, este día nació salado."

¿Te gusta nuestro diccionario?

Además de rebuscar expresiones cañoneras, también contamos chistesitos.

Échale un ojo, si no te ríes en 10 segundos, te hacemos un descuento.

Tu cesta: 0,00 € (0 productos)
Imagen del producto

Tu Carrito de Magia

Tu carrito está vacío. ¡Adopta un Magikito!