Se dice cuando alguien arranca con el mismo cuento de siempre y no hay quien lo pare. Como si de verdad sacara un cassette viejo, le diera play y te tocara aguantar toda la historia, con detalles de más y vueltas innecesarias. Sirve para historias, excusas o sermones largos. Y sí, suele venir con nostalgia incluida.
"Dejalo, hombre, ya sacó el cassette de cuando jugaba en la liga y que el profe lo quería fichar, y ahí va otra vez con el cuento."