Dicho bien mendocino para cuando alguien anda torcido, de mal humor o con una bronca atravesada que no lo deja ni hablar bien. No es tanto estar confundido, es más estar cruzado, sensible y con cara de pocos amigos, como si algo le hubiera quedado en la garganta. Suena gracioso, pero se usa en serio.
"Juancho tiene la chaucha atravesada desde ayer, le hablás del asado y te contesta seco, ni un mate te acepta el loco."