Expresión bien misionera para despedirse con fuerza, como un adiós vitaminado que sale del alma. Se usa cuando te vas con buena onda, dejando claro que te pirás pero con cariño y energía. Es como cerrar la charla con un sello local que dice acá somos de Misiones y nos vamos con estilo.
"Bueno che, ya me rajó al laburo antes de que el bondi me deje tirado, cuídense loco... ¡Ajurule!"