Se dice de alguien que anda medio perdido, despistado o sin rumbo, como si fuera dando vueltas sin entender bien qué pasa. Es esa persona que va por la vida en piloto automático, chocándose con todo y preguntando lo obvio. Bien de campo y bien entrerriano, con el tatú de referencia y los pajonales de fondo.
"Dejalo al Cacho nomás, anda como el tatú desde que le subieron el boleto del bondi y no entiende ni dónde se toma."