Se dice cuando alguien anda con un subidón de energía, acelerado y medio alborotado, como si tuviera el motor prendido todo el día. Es ese mood de no parar quieto, hablar hasta por los codos y querer bailar aunque no haya música. Suena chistoso y bien de pana, como si la pizza diera superpoderes.
"Chamo, ese pana llegó al cumple andar empizzao, se tomó dos refrescos y ya estaba brincando, cantando y armando la rumba en la sala."