En Caracas se dice cuando hay un lío, un problema o un desastre que se salió de control y toca poner orden. Puede ser desde una metida de pata hasta un rollo grande con gente brava. Es como decir resolver el asunto y dejar todo fino, sin más drama. Y sí, suele venir con prisa y nervios.
"Chamo, se regó la cerveza en la sala y ya vienen mis viejos. Muévete, vamos a arreglar el peo antes de que se arme el zaperoco."