Se dice cuando alguien se emperra en una idea y no hay manera de moverlo ni con grúa. Es como plantarse, clavar los cascos y decir que de ahí no te mueves aunque te demuestren que estás equivocado. Muy de cabezón aragonés de toda la vida, y hay que admitir que tiene su gracia cuando no te toca sufrirlo.
"Mira al Julián, que sigue diciendo que el Zaragoza va a ganar la Champions este año. Ha atado la burra pero bien, no lo convences ni con PowerPoint y mariachis."