Plan informal para sentarse a tomar tinto y soltarlo todo: quejarse del trabajo, desahogarse de amores, echar chisme y arreglar el mundo con una amiga o un parcero. Es como una sesión de terapia, pero sin consultorio y con olor a café recién hecho. Mano, a veces eso cura más que cualquier consejo.
"Parce, hoy estoy vuelto nada con el jefe. Caigamos por un tintico y hacemos café-terapia en el Parque de la Vida, a ver si se me baja la piedra."