Se usa para hablar de un aguacero que cae de golpe y dura bien poquito, típico de las zonas áridas del noroeste. Llueve fuerte, hace el show y en dos minutos ya salió el sol como si nada. Es de esas lluvias traicioneras que uno subestima y luego anda todo empapado haciendo como que no pasó nada.
"No mames, salí nomás a la tiendita en chanclas y sin chamarra y que se deja ir un chubasco cachanilla, terminé todo enchinado, con el pelo pegado y la bolsa de las Sabritas flotando en el charco."