En Tucumán, estripar es reventarte la plata de golpe, como si el sueldo te quemara en el bolsillo. Lo usás cuando te mandaste una compra compulsiva, te cebaste en el shopping o te fuiste de joda y al otro día no sabés ni en qué se fue la guita. Duele, pero pasa.
"Cobré ayer y ya estripé la quincena entre el shopping, una picada y dos tragos, ahora ando contando monedas para el bondi."