Se dice cuando alguien va a toda pastilla, rapidísimo, como si lo hubieran disparado. Vale para correr, conducir o hacer algo con prisa y sin frenos. Es una comparación muy gráfica, porque un obús no va precisamente despacio. Vamos, que si pestañeas, ya no lo ves.
"Salió tarde del curro y se fue como un obús por la calle, casi se le cae el bocata y todo, pero llegó al bus en el último segundo."