En Michoacán se usa para hablar de irse al cerro o al campo a pasar la noche bajo la luna, echando chelas, cotorreando y contando historias de miedo o chisme sabroso. Es como armar la fiesta donde no hay luz ni antro, solo la banda, la fogata y la luna haciendo paro. Y la neta tiene su encanto.
"Ya cayó la quincena, hay luna llena y la banda anda prendida, así que al rato nos vamos a lunear al cerro con chelas, bocinas, historias de ánimas y a ver quién aguanta hasta que cante el gallo."