En Bolivia se le dice menorazo, casi siempre con sarcasmo, al chibolo que se agranda y se cree el más bacán o el capo del barrio. Va de sobrado, presume por cualquier cosa y se da aires de grande, pero todavía le falta calle y experiencia. Se usa para bajarle los humos sin tanta vuelta.
"El Diego anda de menorazo porque se compró una moto usada, pero se le pincha la llanta y llama a su mamá para que lo rescate, pues."