Se dice en Misiones para cargar a alguien que está laburando a lo bestia, sin parar, como si fuera un mensú, esos peones de yerbales y obrajes que la pasaban durísima. Es medio en broma, medio con admiración, tipo: che, aflojá un toque que no te están pagando por sufrir. Tiene historia y pega fuerte.
"Mirá a Carlitos con la pala desde las seis, transpirando como loco. Está pasando el mensú mal, y encima dice que después se va a hacer horas extra."