Se dice cuando alguien se manda una que llama la atención de golpe, ya sea por lucirse o por hacer el oso. Es como pegarse un show inesperado que deja a todo el mundo mirando, para bien o para mal. Suele usarse para cosas escandalosas, raras o muy sorprendentes. Y sí, a veces da pena ajena sabrosa.
"En la reunión del barrio se pegó severo pintotazo, llegó con megáfono a “organizar” y terminó cantando vallenato todo desafinado, y la gente muerta de la risa."