En El Salvador se usa para decir que te levantaste o saliste absurdamente temprano, cuando todavía todo el mundo está dormido y la calle da hasta miedito de lo vacía que está. Es como madrugar nivel leyenda, de esos días en que ni el gallo se ha despejado y ya vas vos con cara de zombie. Y hay que admitir que suena elegante para tanto sufrimiento.
"Hoy me tocó hacer un porteo para ir a la oficina, salí tan temprano que ni los bolos de la esquina se habían ido a dormir todavía"