Se usa cuando a alguien se le olvida lo que iba a decir, se distrae bien feo o se queda en la luna viendo al infinito. Es muy típica cuando traes el chisme calientito y de repente tu cerebro dice que siempre no. Es como un cortón mental que da risa, aunque a veces sí desespera machín.
"Te iba a contar lo que pasó en la peda del sábado, pero me distraje viendo los tacos y se me fue la onda bien gacho, ya ni me acuerdo quién acabó besando a quién."