Se dice de alguien que parece tener una mala suerte brutal y constante, como si trajera la nube negra pegada. Si algo puede salir mal cuando esa persona está cerca, casi seguro que se lía todavía más. Es una forma medio en broma medio en serio de culpar a alguien de que todo se tuerza, aunque en el fondo haga gracia.
"Tío, desde que ha venido el Javi al chiringuito no paran de caerse las cañas, de verdad que es un salao de manual, yo ya me iba a mi casa."