Se usa para hablar de alguien que está hiperactivo perdido, que no para quieto ni un segundo y parece que tiene una pila infinita. Vale tanto para críos muy movidos como para adultos que siempre están liándola o metidos en mil historias. No es insulto grave, más bien una mezcla de queja cariñosa y cachondeo, y hay que admitir que la frase tiene bastante gracia.
"Mira al guaje, lleva toda la tarde saltando por el sofá y persiguiendo al perro, ese críu tien el diablo en el cuerpo fijo."