Expresión muy usada para decir que alguien se va rápido de un lugar, casi siempre porque está embolado, incómodo o ya no pinta nada seguir ahí. Es como decir me las pico o me rajo, bien porteño y con onda. Y seamos sinceros, a veces tomarse el palo es el mejor plan de la noche.
"Che, esto está más muerto que la siesta del domingo, me tomo el palo y me voy a ver qué onda en lo de los pibes."
Expresión muy usada para decir que alguien se va rápido de un lugar, casi rajándose a las apuradas para evitar quilombos o situaciones incómodas. Es como desaparecer antes de que te enganchen o antes de que algo se ponga feo. Bien típica del habla rioplatense y muy útil cuando querés borrarte sin hacer mucho ruido.
"Pintó control en la previa y yo sin un mango encima, así que me tomé el palo por el patio antes de que cayera la cana y me arruinara la noche."