Personaje imaginario con fama de siniestro que los papás usan para espantar a los chamacos que andan de desmadrosos. La idea es que si no se portan bien, el viejo del costal llega, los mete en su costal y se los lleva quién sabe a dónde. Es más una táctica de control parental que una amenaza seria, pero sí saca uno que otro susto.
"Ya duérmete, chamaco, que si sigues corre y corre va a venir el viejo del costal y te va a llevar a dar la vuelta por todo Tamaulipas en su costal todo mugroso."