Expresión orientalísima para hablar de alguien agrandado, que se cree la última Pepsi del desierto y va por la vida inflado de ego. Es como decir que presume más de lo que realmente es, puro bulto y poca sustancia. Suena graciosa, pero también lleva su toque de burla sabrosa, bien típica del oriente venezolano.
"Desde que el pana se compró ese carrito a crédito anda ancho como papelón, llega a la fiesta saludando con un dedo y creyéndose dueño de toda Maturín."