Se usa para decir que alguien anda bien vestido, bien bañado en joyas y brillando como si le hubieran caído los millones. Es ese compa que llega al antro con reloj dorado, cadenota y hasta el cinturón presume. No siempre significa que tenga lana de verdad, pero la pinta de buchón elegante no se la quita nadie.
"No manches, el José llegó tan diamanteado a la fiesta, con cadenota y reloj dorado, que todos pensaron que era narco o mínimo dueño del salón."