Se dice cuando andás medio atontado, mareado o como desconectado, tipo recién salido de una anestesia o después de dormir mal. También vale para el que está colgado, distraído y no caza una, mirando al vacío. Es bastante neuquino y suena a que el cerebro todavía no prendió.
"Salí del laburo y me fui a comprar pan, pero andaba pezco mal y terminé en la verdulería preguntando por facturas."