Se dice cuando alguien arma todo un escándalo contando lo que va a hacer, pero en verdad todavía no ha hecho nada. Mucho ruido y pocas nueces, puro show y cero acción. Es como cuando uno ya está celebrando el gol sin haberle pegado al balón. Y hay que admitir que para bajarle los humos a la gente viene de maravilla.
"Pedro lleva días anunciando el trueno con que va a ganar la competencia, y anoche se quedó dormido viendo novelas y ni siquiera fue al primer entrenamiento."