En Barinas se usa burda para decir que algo es mucho, demasiado o muy intenso, casi siempre en buen plan. Sirve para exagerar cuando algo está brutal, sabroso o pasado de bueno. También puede ir con cosas negativas, pero la gente la suelta más cuando está emocionada. Es de esas palabras que se te pegan y luego no las sueltas.
"Marico, la rumba anoche estuvo burda de buena, terminamos bailando en la plaza y llegué a la casa cuando ya estaban cantando los gallos."
En Venezuela, burda se usa como intensificador, rollo “mucho”, “un montón” o “demasiado”, según el contexto. Sirve tanto para cosas buenas como malas: burda de fino, burda de caro, burda de lejos. Es de esas palabras comodín que te suben el volumen de la frase sin pensarlo mucho.
"Marico, ese concierto estuvo burda de brutal, pana. Salí sin voz, con la franela sudada y todavía con el bajo retumbándome en el pecho."