En Antioquia se usa para decir que alguien se pone nervioso, se asara o se delata sin querer, como cuando estás haciendo una vuelta medio rara y te pillan con una pregunta. Es ese temblorcito de culpa que te hace hablar de más o poner cara de yo no fui. Muy útil para travesuras y mentiritas piadosas.
"Parce, cuando tu mamá preguntó por la plata del mercado, casi te chiviás y se te notó todo. Relajate, pues, que nadie sabe que nos fuimos de rumba el viernes."