Se le dice al que se mete a opinar donde nadie lo llamó, como si fuera juez del asunto sin tener vela en el entierro. Es el típico que llega, escucha dos frases y ya está dictando sentencia, regañando y repartiendo culpas. Suena bien guajiro y medio burlón, pa’ bajarle el humo al metiche.
"No joda, compa, deja el cogejuéz: ni sabes qué pasó y ya estás fallando como si fueras el juez del pueblo."