Expresión muy santandereana para hablar de cuando alguien está sin hacer nada productivo, tirado a la vida, dejando que el tiempo pase mientras calienta silla o hamaca. Es como dedicarse a la pereza con orgullo, sin remordimiento alguno. Se usa mucho cuando hace calor y el plan es cero estrés, cero trabajo y mucha vagancia.
"Mamá, no moleste que hoy es domingo de echar huevo, yo no pienso ni tender la cama ni sacar al perro, máximo me levanto a servir más tinto."