Se usa cuando alguien se pone las pilas y le mete toda la pasión, energía y hasta coraje a algo. Es como decir que ya te prendiste y vas con todo, sin andar de tibio ni de flojo. Muy de cuando hay prisa, presión o simplemente ganas de lucirse, y la neta suena bien intenso.
"Ya viene el profe a recoger los trabajos, raza, hay que echarle fuego a la tarea porque si no otra vez nos vamos a extraordinario."
Se usa cuando alguien está consiguiendo provocar una situación caótica, tal y como un mono con cerillas en una gasolinera durante las Fallas.
"Cuando Manolo llegó a la fiesta, ya se oía que estaba echándole fuego: tres vecinos enfadados y un cactus ardiendo."
Expresión utilizada cuando alguien está discutiéndole a otro con demasiada intensidad, casi echando chispas y punto flamígero en plena discusión sobre fútbol.
"Che, viste cómo Lucrecia se puso en la charla del clásico; estaba echándole fuego como si Batistuta fuera tío suyo."
Cuando alguien le pone picante exagerado a una comida para impresionar al personal, causando más lagrimones que gusto.
"Juanito le echó fuego al guiso y acabamos viendo el mismo videoclip: botellas de agua terminándose antes de llegar a la mitad del plato."