Se usa para hablar de ese estado de descanso profundo y sabroso, cuando quedas tirado sin preocupaciones y el mundo puede caerse que tú ni te inmutas. Muy típico después de comer pesado o de una jornada larga en el campo. Es como entrar en modo hibernación costeña, y la verdad es que provoca pura envidia verlo.

"Parce, después de esa frijolada donde mi tía y el paseo al río, quedé en la hamaca en puro estabezón, roncando tan duro que ni la música a todo volumen del vecino me movió un pelo"

¿Te gusta nuestro diccionario?

Además de rebuscar expresiones cañoneras, también contamos chistesitos.

Échale un ojo, si no te ríes en 10 segundos, te hacemos un descuento.

Tu cesta: 0,00 € (0 productos)
Imagen del producto

Tu Carrito de Magia

Tu carrito está vacío. ¡Adopta un Magikito!