En el Quindío se usa para decir que alguien está muy bravo, reventando de la rabia, como a punto de explotar. Según el contexto también puede significar que alguien es muy verraco, o sea, valiente, echado pa' lante y bien avispado. Es de esas palabras cafeteras que sirven tanto para pelear como para echar flores, y eso tiene su encanto.

"Parce, mi papá se puso tan berraco cuando vio la cuenta del bar que pensé que iba a vender el carro ahí mismo para pagarla."

¿Te gusta nuestro diccionario?

Además de rebuscar expresiones cañoneras, también contamos chistesitos.

Échale un ojo, si no te ríes en 10 segundos, te hacemos un descuento.

Tu cesta: 0,00 € (0 productos)
Imagen del producto

Tu Carrito de Magia

Tu carrito está vacío. ¡Adopta un Magikito!