Se usa en el sur de Chile cuando alguien anda lleno de preocupaciones, deudas o pega encima, como cargando un peso enorme todo el día. Es como decir que la vida se puso pesada y uno anda medio aplastado por las responsabilidades. No es muy alegre que digamos, pero la imagen de llevar una vaca al hombro igual tiene su gracia absurda.
"No puedo ir a pescar al río, compadre, estoy con la vaca al hombro con la pega, las cuentas y la camioneta que se echó a perder justo ahora."