Se dice de alguien que está perdiendo el tiempo a lo grande, vagueando sin hacer nada útil cuando tendría que estar a lo suyo. Vamos, el típico que se escaquea, se apalanca y va dejando las cosas para mañana. En Aragón suena muy de casa, como cuando te pillan en modo perro y te cantan las cuarenta.
"En vez de hincar codos para los exámenes, Miguel lleva toda la tarde haciendo el zaborrero en el sofá, con la manta y la tele a todo trapo."