Se dice en plan broma para bajarle dos rayitas a alguien que anda acelerado, ansioso o medio desesperado, como si fuera a aventarse al primer metro que pase. Justo por eso da risa en Oaxaca, donde ni metro hay. Es una forma de decir: relájate, no es para tanto, no corras.
"¡Ey, cálmate! No te metas al metro por los tacos, apenas están prendiendo el comal y tú ya andas como si se acabara el mundo."