Se usa cuando algo no alcanza, no funciona como debería o simplemente no da el ancho. Puede ser la comida que no alcanza para todos, el dinero que se acaba en dos días o hasta el esfuerzo que no se ve reflejado. Es muy de quejarse con humor, porque sí frustra, pero también da risa cómo todo se queda corto.
"Compramos chelas, botana y hasta gelatina de mosaico, pero llegaron veinte colados y ya no alcanzó nada... esta fiesta no rinde ni tantito"