Expresión muy usada en el sur de Chile para hablar de un porrazo chico, un raspón o un golpecito medio tonto por andar en la luna. No es un accidente grave, más bien algo que duele, te deja medio picao y después te ríes igual. Es como decir que te sacaste la mugre, pero en versión suave y con cariño.
"Iba apurado pa'l centro, mirando el celu como weón, y me pegué el raspacacho con la micro estacionada, quedé todo rallado y los cabros muertos de la risa."